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La noticia de que Joaquín Levinton, cantante de Turf, sufrió un infarto de miocardio en pleno show y tuvo que ser sometido a la colocación de un stent volvió a poner en agenda un tema clave: la salud cardiovascular. Más allá del impacto mediático, su caso sirve como recordatorio de por qué son tan importantes el control médico anual, la consulta con el cardiólogo y los hábitos de cuidado del corazón en la vida cotidiana.

¿Qué es un infarto de miocardio?

Un infarto de miocardio ocurre cuando una de las arterias coronarias —las que llevan sangre al músculo cardíaco— se bloquea de manera brusca. Al interrumpirse el flujo de sangre y oxígeno, una parte del corazón empieza a sufrir y, si no se actúa a tiempo, ese tejido puede morir.

En términos simples:

  • Hay una arteria del corazón tapada (por un coágulo que se forma sobre una placa de colesterol, por ejemplo).
  • El músculo cardíaco que depende de esa arteria deja de recibir oxígeno.
  • Si no se desobstruye rápido, se produce daño permanente.

Por eso se habla de emergencia médica: cada minuto cuenta.

Síntomas de alerta de un infarto

No todos los infartos se presentan igual, pero hay signos de alarma que nunca hay que minimizar:

  • Dolor o molestia opresiva en el centro del pecho, que puede irradiarse a brazo izquierdo, mandíbula, espalda o cuello.
  • Sensación de peso o ardor en el pecho que no cede con el reposo.
  • Falta de aire, dificultad para respirar.
  • Sudor frío, palidez, náuseas o vómitos.
  • Mareos, sensación de desmayo inminente.

En mujeres, personas mayores y personas con diabetes los síntomas pueden ser más “atípicos”: cansancio extremo, malestar difuso, dolor en la espalda o solo falta de aire sin un dolor de pecho tan claro.
Ante la sospecha de infarto, no hay que “esperar a ver si se pasa”: lo correcto es pedir ayuda de emergencia (SAME u otro servicio) y acudir de inmediato a una guardia.

¿Por qué a Joaquín Levinton le colocaron un stent?

Según trascendió en los medios, los estudios mostraron una arteria o vena del corazón parcialmente bloqueada, y los médicos decidieron realizar un cateterismo con colocación de stent, un procedimiento muy frecuente en el contexto de un infarto.

¿Qué es un stent?

Un stent coronario es un pequeño tubo de malla metálica que se coloca dentro de la arteria para mantenerla abierta. El procedimiento se llama angioplastia y, a grandes rasgos, consiste en:

  1. Introducir un catéter por una arteria de la muñeca o la ingle.
  2. Llegar hasta la arteria coronaria tapada.
  3. Inflar un pequeño balón que abre el paso.
  4. Dejar el stent “apuntalando” la pared de la arteria para que no se vuelva a cerrar.

Este tipo de intervención ayuda a restablecer el flujo de sangre al corazón y, cuando se realiza a tiempo, mejora el pronóstico del infarto y reduce el daño permanente.

La importancia del control médico anual para prevenir un infarto

Muchos problemas cardíacos se gestan en silencio durante años. Por eso, aunque uno “se sienta bien”, el control médico anual es una herramienta clave de prevención. En un chequeo clínico básico se pueden detectar:

  • Presión arterial elevada.
  • Colesterol y triglicéridos altos.
  • Azúcar en sangre alterada (prediabetes, diabetes).
  • Sobrepeso u obesidad.
  • Tabaquismo, sedentarismo y otros factores de riesgo.

En algunos casos, el médico de cabecera puede solicitar estudios complementarios como:

  • Electrocardiograma.
  • Análisis de laboratorio más completos.
  • Prueba de esfuerzo o ergometría.
  • Ecocardiograma u otros estudios según cada caso.

Detectar a tiempo estos factores permite intervenir antes de que aparezca el infarto o sus complicaciones.

¿Cuándo conviene ir al cardiólogo?

No hace falta haber tenido un susto para consultar con un especialista. Conviene pedir turno con un cardiólogo si:

  • Tenés antecedentes familiares de infarto, ACV o muerte súbita a edades tempranas.
  • Sos hipertenso, diabético o tenés colesterol alto.
  • Fumás o fumaste durante muchos años.
  • Tenés sobrepeso, obesidad o llevás una vida muy sedentaria.
  • Notás dolor en el pecho con el esfuerzo, falta de aire, palpitaciones o cansancio excesivo.

El cardiólogo puede ajustar estudios, medicación y seguimiento según tu perfil de riesgo, y ayudarte a armar un plan para cuidar el corazón de manera sostenida.

¿Cómo cuidar el corazón todos los días?

El tratamiento del infarto no termina en la internación ni en la colocación de un stent. El verdadero cambio está en los hábitos de todos los días. Algunas medidas que marcan la diferencia:

  • No fumar: dejar el cigarrillo es una de las intervenciones más importantes para reducir el riesgo cardiovascular.
  • Alimentación saludable: más frutas, verduras, legumbres, granos integrales; menos ultraprocesados, sal en exceso y grasas trans.
  • Actividad física regular: al menos 150 minutos semanales de ejercicio aeróbico moderado (caminar rápido, bicicleta, natación) si el médico lo permite.
  • Control del peso: mantener un peso adecuado para la talla ayuda al corazón a trabajar mejor.
  • Manejo del estrés y del sueño: dormir bien y gestionar el estrés también forman parte de la salud cardiovascular.
  • Adherencia a la medicación: después de un infarto o si hay factores de riesgo, seguir el tratamiento indicado (aspirina u otros antiagregantes, estatinas, antihipertensivos, etc.) es fundamental.

Planes de salud, controles preventivos y emergencias

El caso de Joaquín Levinton recuerda que un infarto puede ocurrir en plena actividad, incluso en personas que se ven jóvenes o activas. Contar con una buena cobertura de salud facilita:

  • Acceso rápido a guardias y unidades coronarias.
  • Estudios diagnósticos (electrocardiograma, análisis, estudios por imágenes).
  • Internaciones y procedimientos de alta complejidad como la angioplastia con stent.
  • Controles cardiológicos periódicos y programas de rehabilitación cardiovascular.
  • Evaluaciones preventivas antes de iniciar actividad física exigente.

Si estás pensando en mejorar tu cobertura o en tener un plan que acompañe el cuidado de tu corazón y el de tu familia, en Salud y Bienestar podés comparar propuestas y encontrar un plan que te acompañe en este proceso.

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